Jorquera pide ayuda urgente ante la invasión de cabras en el casco urbano

Una sobrepoblación sin control lleva a los animales salvajes a irrumpir en patios, parques y tejados del municipio albaceteño, donde ya causan daños agrícolas y riesgos estructurales

Lo que parecía una anécdota extravagante ha servido para poner en el foco un problema que lleva años creciendo en la provincia de Albacete. En Ribera de Cubas, pedanía de Jorquera, una cabra montesa cayó desde el tejado de una vivienda directamente al patio, muriendo por el impacto. No hubo que lamentar daños personales, pero el suceso ha provocado una reacción inmediata de la alcaldesa de la localidad, Pilar Medina, que, tal como informa el diario El Debate, ha solicitado ayuda urgente a la Delegación del Gobierno y a la Diputación de Albacete.

“No es una cuestión puntual ni anecdótica, es una situación insostenible”, advierte Medina. La sobrepoblación de cabras montesas es un problema histórico en la comarca, pero nunca había alcanzado la dimensión actual. Ahora entran en zonas urbanas, deambulan por parques, trepan tejados como si fueran riscos y llegan incluso a meterse en viviendas particulares, dejando una estampa tan insólita como peligrosa.

Peligro para los cultivos y las infraestructuras

Más allá del surrealismo de la escena, el problema es profundo y estructural. Las cabras devoran cultivos, afectan a la agricultura local y, en los últimos tiempos, provocan pequeños derrumbes en carreteras debido a su tránsito por taludes y zonas inestables. Estas consecuencias no solo afectan a la economía rural, sino que ponen en peligro a los conductores y al mantenimiento de las vías, especialmente en áreas montañosas y de difícil acceso.

La alcaldesa señala que no se trata solo de Jorquera, sino de un fenómeno que afecta a numerosos municipios de la provincia, extendiéndose con rapidez debido a la falta de depredadores naturales y la ineficacia de los controles poblacionales actuales.

Una llamada a la acción

Ante esta situación límite, Pilar Medina ha pedido una respuesta institucional inmediata, que incluya medidas de gestión y control de fauna salvaje, estudios poblacionales actualizados y la colaboración entre administraciones para evitar que la sobrepoblación derive en accidentes o daños mayores.

La escena de una cabra cayendo desde un tejado ha servido como metáfora perfecta del problema: lo que antes era un riesgo ambiental contenido, ahora se ha precipitado —literalmente— sobre los hogares de los vecinos.

Comentarios

Entradas populares