Año 1953: Casa Máximo en su apogeo

infoJUCAR | Una mirada a la historia real de este emblemático e histórico edificio en las entrañas del Pico Caroche

© Notas de Campo-Pedro Montoya Después de un año de seguimiento e investigación del equipo de expediciones de Pedro Montoya y gracias a la colaboración de Javier Miravalles y posteriormente del nieto de MÁXIMO Manuel Gracia Martínez y de su madre Concepción Martínez Salt (hija de MÁXIMO) hemos podido documentar con fotografías de la época y un texto escrito por la hija de MÁXIMO.

Este artículo único e inédito ve la luz del día por primera vez después de tantas preguntas realizadas entre los lugareños de Teresa de Cofrentes, sobre especulaciones e interrogantes de este gran caserío o finca que deslumbra entre los Montes de Caroche.

La verdadera historia de Casa Máximo

Texto e imágenes cedidas para la publicación por D. Manuel Gracia Martínez (nieto de Máximo).

I - CARTA ESCRITA POR DÑA.CONCEPCIÓN MARTINEZ SALT (Hija de Máximo):

LA “CASA MAXIMO”

…. A una hora andando del Pico de Caroche se encuentra la “Cañada del Chilano”, un valle donde en su solana había tres casas adosadas y corrales donde se encerraba el ganado, cabras en su mayoría. Mi abuelo, José Martínez Ibáñez, el “Tío Máximo el Cojo”, era el dueño de dos de ellas y compartían el agua de la fuente y de su balsa.

Al acabarse la guerra civil, su hijo Máximo Martínez Jiménez, mi padre, que luchó en el bando perdedor, vuelve con su familia al pueblo, a la casa de sus padres: Jacoba y José. Al cabo de unos días mi padre le pregunta a mi abuelo como proceder para rehacer su vida y éste le dice que se presente en el Ayuntamiento, a las nuevas autoridades…

Máximo fue encarcelado en Ayora durante nueve meses con otros compañeros del pueblo que, como él, habían luchado en el bando rojo. Fueron juzgados, su caso sobreseído, pero quedó en vigilancia durante tres años con la obligación de presentarse a la Guardia Civil de Xátiva cada tres meses. En ese tiempo Máximo y su familia se van a vivir “al monte”, a la casa de sus padres. Pasan penalidades, pero acaban saliendo de las dificultades criando conejos de forma intensiva.

Pasado ese periodo, pasan un año en Valencia, en casa de una cuñada y en 1944 se trasladan a Barcelona, donde Máximo acaba fundando una empresa dedicada al mantenimiento y reparación de motores de barcos.

Con las tierras de Teresa de Cofrentes heredadas de sus padres, Máximo va realizando permutas con otros propietarios de casas y bancales en la Cañada del Chiclano: Quiteria, El Hornago, El Manglano, etc… hasta hacerse con casi todo el valle y con el propósito de convertirlo en un vergel.

Así pues canalizó las aguas, hizo balsas, ribazos y plantó árboles: manzanos, ciruelos, etc… y acabó construyendo una gran casa y corrales: la admirada “Casa Máximo”. Acabó construyendo una carretera hasta la “Casa Caviró”, cuyo dueño la continuó hasta el pueblo de Ayora.

Su prematura muerte en 1966, a los 59 años, lo truncó todo y sus herederos no pudimos continuar con esa joya de proyecto.

Gracias al Ayuntamiento de Teresa de Cofrentes por mantener viva la “Casa Máximo” con sus actividades culturales. Mi sincero agradecimiento a todos.

Concepción Martínez Salt (Hija de Máximo)

Barcelona, Mayo de 2018

(Gracias a la Colaboración de D. Javier Miravalles)

Desde siempre nos ha cautivado su Majestuosidad y su Misterio, oculta entre pinos y montañas, también surgían preguntas sobre todo de cuando estaba en su apogeo, en una época en la que solo se construía casas o caseríos humildes.

La producción agrícola y ganadera de la finca de Casa Máximo

Como se puede apreciar en las imágenes que son reflejo de la vida que se desarrollaba en ese enclave maravilloso que es el corazón de Caroche, abundaban las vacas, cerdos, conejos y aves de corral.

La agricultura también estaba presente en los enormes báncales y las balsas proveían del agua necesaria para su regadío y disfrute de los habitantes de la gran Finca.

La perseverancia y el tesón en el Campo de la Investigación por parte de este EQUIPO DE EXPEDICIÓN de Pedro Montoya, así como la ilusión por desvelar Retales Temporales donde el espacio de la Historia ha desaparecido con la consiguiente pérdida y olvido para futuras generaciones, acompañado de la suerte de encontrar a la persona adecuada colaboradora de Javier Miravalles, que tenía  contacto directo con las Generaciones de MAXIMO "Manuel Gracia Martínez- nieto de Máximo" y su madre "Concepción Martínez Salt-hija de Máximo", nos han dado como fruto el poder compartir con todos los Teresinos y Teresinas este Trocito de Historia olvidada en el tiempo y de un Interés especial para la Población de Teresa de Cofrentes (Valencia).